Los días de actuación en Arimaktore (Barakaldo) han sido muy intensos y emotivos. Como os anunciaba en la entrada anterior, hemos presentado allí el programa doble de los dos espectáculos: 'protAgonizo' y 'Todas a la una'. La sala es pequeñita pero tiene también por ello un encanto muy especial, posibilita tener un encuentro muy cercano con el público y así ocurrió, se produjo en ambos casos una gran complicidad con la gente que asistió a verlos y la cosa dió mucho juego. Después de cada actuación celebramos un coloquio con el público, los cuales fueron también muy entrañables. Ander y Alicia, los responsables de la sala, son una gente estupenda, entusiasmada con sacar adelante su teatrito y con hacer cosas interesantes en él. Ha sido un verdadero placer compartir con ellos estos días y dejarse contagiar de su amorcito para con el teatro. Además de todo ello me regalaron con su hospitalidad alojándome en su casa, ubicada en Artziniega, un pueblo medieval y preciososo que hay a tan sólo veinte minutos de Barakaldo. Cada mañana, al levantarme, podía contemplar esta campiña que véis en la foto desde la ventana. ¡Un lujazo! Ha sido un fin de semana muy mágico, la verdad. Gracias.
Hemos terminado con las actuaciones que teníamos previstas en esta temporada, tanto de 'protAgonizo', como de 'Todas a la una'. En cuanto nos ofrezcan otro escenario para ellos os lo cuento. ¡Hasta entonces!