En este precioso caserío de unos amigos he estado alojada estos últimos días en que viajé al País Vasco para hacer el bolo de Bergara. La nieve que cayó la misma noche en que llegué me dejó incomunicada. Ion (en la foto de abajo), un vecino que no me conocía de nada, me hizo el favor de bajarme en su 4 X 4 y pude llegar hasta el teatro para hacer la función. ¡Toda una odisea! Nunca he visto una nevada igual, fue espectacular.
Gracias Ion (en la foto) por el rescate, a los amigos del caserío y al público asistente que, pese al frío y dificultades que ofrecía una nevada tan intensa, acudió a ver el espectáculo.
Al llegar a Madrid la nieve también se ha hecho presente. He aprovechado esta mañana a hacer algunas pintadas. Aquí os pongo una.
martes, 12 de enero de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario